El Pleno ordinario del mes de julio llevará en su orden del día la aprobación inicial de las normas urbanísticas del PGOU de 1986, un punto que necesita del voto favorable de Marbella Sí Puede para salir adelante. Un apoyo con el que contará el equipo de Gobierno sólo si cumplen con una serie de acuerdos previos firmados por la plataforma auspiciada por Podemos con el tripartito y que aún están a la espera de que se vean plasmados en la realidad. Así lo hizo constar su portavoz, José Carlos Núñez ‘Kata’, quien señaló que para la próxima sesión plenaria estos deberán llevarse a Pleno “como muestra de confianza del cumplimiento de los acuerdos”. Una postura que ya ha tenido que adoptar la formación en otras ocasiones como fue en la aprobación de los presupuestos para el vigente año.
B. Sánchez
En esta ocasión la formación reclama que “se publiquen los decretos y reglamentos para convocar ayudas a la rehabilitación de viviendas, la creación de un equipo técnico auditor, introducir normas sociales en los contratos, constitución de la comisión de investigación del deslinde, puesta en marcha de la oficina hipotecaria, convocatoria de la mesa de contratación de personal y licitación del equipo acuático de los bomberos y las paradas multimodales, así como el estudio de la demanda del transporte local”.
No obstante, Núñez quiso apuntar que “no es y nunca ha sido nuestra intención supeditar unas cuestiones de responsabilidad a otras, pero resulta evidente que se hace más complicado alcanzar acuerdos si antes no se cumplen los anteriores”. En este sentido el edil señaló que no consideran suficiente que los pactos se cumplan “ni en un 30, ni en un 73%”, ya que su objetivo es “el cumplimiento por completo”.
Este compromiso se encuentra dentro del acuerdo alcanzado para la aprobación de la normativa urbanística y que contempla además otras cuestiones como la “ampliación a 45 días del periodo de alegaciones”, de tal modo que permita que puedan realizarse más allá del mes de agosto.
La formación también acordó con el tripartito la introducción de hasta 35 cambios en el documento actual, unas alteraciones que, por preferirlo así el PSOE, se realizarán como alegaciones una vez se produzca la aprobación inicial, ya que la formación del alcalde de la ciudad, José Bernal, asegura que así “se agilizaría el proceso” según lo apuntado por Marbella Sí Puede.
En este sentido, Núñez reprochó que “el tripartito no se ha dado la misma urgencia en otras cuestiones que, pese a no tener intereses económicos, para CSSP son vitales, como el rescate ciudadano o la auditoría”.